Azurita

La Azurita posee la rica vitalidad de su energía azul oscura resuena a la frecuencia exacta del Chakra del Tercer Ojo, que guía a las almas hacia la iluminación.

Geoda de cuarzo
    Cuarzo turmalinado
    Cuarzo ahumado
    Cuarzo arcoiris
    Cuarzo rutilado
    Fluorita
    Citrino
    Crisoprasa
    Cuarzo cristal
    Cuarzo rosa
    Cornalina
    Cuarzo blanco
    Charoíta
    Azurita
    Aventurina
    La Malaquita
    Ametrino
    Ágata
    La Amatista
    Heliotropo

Piedra que guía a la Iluminación, poder y sabiduría.

La Azurita posee la rica vitalidad de su energía azul oscura resuena a la frecuencia exacta del Chakra del Tercer Ojo, que guía a las almas hacia la iluminación.

Piedra psíquica muy potente y envuelta en misterio; sus secretos conocidos solamente por los más altos sacerdotes y sacerdotisas.

Este cristal estimula el intelecto, despertando el desarrollo de habilidades psíquicas e intuitivas, y trae la visión interna en alineación con el Guía Espiritual.

Despeja la tensión y la confusión, y abre la mente a nuevas perspectivas. 

Limpia y fortalece el cuerpo emocional, liberando el estrés y la preocupación, y superando el dolor y la tristeza. 

Aporta una luz sanadora a la conciencia, lo que le permite infundirse en pensamientos, sentimientos, palabras y acciones

Puede usarse para mejorar los sueños, entrar en un estado meditativo o de canalización, y permite que los viajes fuera del cuerpo tengan lugar de manera segura.

Es beneficiosa para explorar vidas pasadas o alternas, y su capacidad para en el Chakra de la Garganta, permitiendo una verbalización precisa recordada de estas experiencias.

La Azurita inspira la búsqueda de la verdad en la realidad personal dejando de lado los viejos sistemas de creencias programados, y expandiendo la conciencia hacia una comprensión más profunda de la vida. 

Color de la energía

La energía azul vibrante de la Azurita tiene la capacidad de mover el pensamiento subconsciente a la mente consciente para que sea revisada y probada en busca de verdad, una búsqueda que revela los verdaderos motivos de uno en conexión espiritual y si son para el mayor bien de todos los seres y no para beneficio personal. la realización del ego.

La Azurita también permite que uno sienta la verdad en lo que otros nos harían creer y protege a uno de ser engañado.

La piedra Azurita-Malaquita cuando posee las dos manchas de color es un excepcional conductor de energía, que brinda un proceso más integrado y conectado a tierra para curar las enfermedades físicas. 

El rayo azul penetra y mueve la energía, calmando los niveles de estrés dentro del sistema, mientras que el rayo verde facilita una fuerza de curación profunda. 

También se puede usar para activar el Tercer Ojo para limpiar el subconsciente de pensamientos cargados emocionalmente o sentimientos negativos, y para restaurar un estado mental más alto y más claro. 

Ayuda a disolver los rasgos egocéntricos, e infunde una disposición hacia la flexibilidad e individualidad basada en una conexión universal con el «Todo».

Composición interna.

Silicato: Carbonatos

Sistema cristalino: Monoclinico

Dureza: 3,5 a 4

Brillo: Vítreo mate, terroso

Color de raya: Blanco

Fórmula Química: Cu3(CO3)2(OH)2

Características mineralógicas

La azurita es un carbonato de cobre de color azul oscuro e intenso. Su nombre proviene de la palabra persa “lazhward”, que significa “azul”. Se forma en las zonas oxidadas de depósitos de calcio, por la acción de aguas carbonatadas sobre los minerales de cobre. Suele encontrarse junto con la malaquita o la cuprita. Aparece en forma de cristales prismáticos o tabulares, y también en hábito masivo, estalactítico y botroidal.

La azurita puede transformarse lentamente en malaquita por causa de procesos químicos y por la acción de la oxidación. A simple vista lo que podemos ver en esta transformación es el cambio de color, que pasa de ser azul oscuro a verde oscuro. El polvo de la azurita es tóxico, con lo que hay que evitar su inhalación o ingestión. Antiguamente la azurita se extraía para ser utilizada como cobre y también para hacer pigmentos. Existen obras de arte de los siglos XV, XVI y XVII pintadas con pigmentos de azurita.

Yacimientos: Francia, Namibia, Perú, Estados Unidos, Australia, Marruecos, Groenlandia, Chile, Namibia, Canadá, Rusia, Egipto y Afganistán.

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